La web funciona siguiendo la denominada arquitectura cliente-servidor. Esta arquitctura implica la existencia de una relación entre procesos que solicitan servicios (clientes) y procesos que responden a esos servicios (servidores). Estos procesos pueden ejecutarse en una misma computadora o en distintas.
La web es un tipo de aplicación especial que funciona bajo esta arquitectura cliente/servidor, donde tanto el cliente (el navegador, browser) como el servidor (el servidor web) y el protocolo mediante el que se comunican (HTTP) están estandarizados y no han de ser creados por el programador de aplicaciones.
El protocolo HTTP forma parte de la familia de protocolos de comunicaciones TCP/IP, que son empleados en Internet. Estos protocolos permite la conexion de sistemas heterogéneos, lo que facilita el intercambio de información entre distintas computadoras.
El cliente web interacciona con el usuario para solicitar a un servidor web el envió de recursos que desea obtener mediante HTTP. La parte cliente de la web suele estar formada por el código HTML que forma la página web al cual se le puede incorporar código en lenguaje de script como JavaScript o VBScript ó pequeños programas realizados en Java (applets). La misión del cliente web es interpretar las páginas HTML y los diferentes recursos que contienen (imagenes, sonidos, etc.).
Las tecnologías que se suelen emplearse en programas de lado del cliente son: HTML, CSS, DHTML, lenguajes de Script (como JavaScript), ActiveX, Applets y pluggins como: Adobe, Acrobat Reader, Macromedia Flash entre otros.
El servidor web espera permanentemente las solicitudes de conexion mediante el protocolo HTTP por parte de los clientes web. La parte del servidor de las aplicaciones web esta formada por:
- Páginas estáticas (documentos HTML) que siempre muestran el mismo contenido.
- Recurso adicionales (como contenido multimedia, documentos) que se pueden emplear dentro de las páginas web o estar disponibles para ser descargados y ejecutados (visualizados) en el cliente.
- Programas o scripts que son ejecutados por el servidor web cuando el navegador del cliente solicita algunas páginas. La salida de un script suele ser una página HTML estándar que se envía al navegador del cliente. En algunos casos estos scripts pueden acceder a bases de datos.
El proceso completo, desde que el usuario solicita una página, hasta que el cliente web muestra el contenido es el siguiente:
- El usuario especifica en el cliente web (navegador) la dirección URL de la página deseada que desea consultar.
- La URL es traducida a una dirección IP por medio de una base de datos distribuida llamada DNS (Domain Name System), que es necesaria para contactar con el servidor web.
- El cliente establece comunicación con el servidor web y solicita la página deseada.
- El servidor busca la página que ha sido solicitada en su sistema de archivos. Si lo encuentra, la envía al cliente; en caso contrario, devuelve un código de error.
- El cliente interpreta los códigos HTML y muestra la página al usuario.
- Se cierra la conexión.
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